Conocer las necesidades, preferencias y perfil sociológico de la población mayor de cincuenta años resulta fundamental para que la industria alimentaria sea capaz de desarrollar nuevos productos adaptados a sus demandas. Con el fin de dar a conocer las claves de este nuevo mercado, AZTI-Tecnalia y Basque Culinary Center organizaron a finales de Octubre el simposio ‘Growing young’, que ha contado con la colaboración de la Asociación de Fabricantes y Comercializadores de Aditivos y Complementos Alimentarios (AFCA).
La jornada se centró en el contexto sociológico, gastronomía aplicada, tendencias y demandas de los consumidores sénior, así como en sus necesidades y en las particularidades de su dieta a lo largo del proceso de envejecimiento.
Según el profesor de sociología de la UPV-EHU Iñaki Martínez de Albéniz, “es contraproducente encerrar al sector sénior en un retrato estadístico. Por el contrario -afirma el sociólogo-, hay que considerarlo como un consumidor reflexivo, darles voz y atender a su estilo de vida”.
Desde el Observatorio de tendencias y mercado de AZTI-Tecnalia apuntamos a la “importante oportunidad que para el mercado alimentario, principalmente en Europa y España suponen los séniors y los young séniors, un segmento poblacional muy numeroso y en rápido crecimiento”. Las oportunidades para la innovación en productos de alimentación y bebidas dirigidos a este target “giran en torno a tres ejes: la salud, sobre todo en términos de comunicación y de mostrar claramente el beneficio al consumidor; la comodidad en cuanto al uso y consumo del producto; y el placer”. El gran reto de la industria alimentaria “es conseguir productos que no sólo nutran sino que sean placenteros, buscar el placer a través de la sensorialidad y provocar emociones, en definitiva volver a disfrutar comiendo y solventar así problemáticas asociadas a las mermas sensoriales o de salud que desembocan en la pérdida de apetito”.
Según Matxalen Uriarte, responsable del área de Nuevos Alimentos de AZTI-Tecnalia, “el futuro está en crear productos que nos permitan que, a los 70 años, nos mantengamos como actualmente a los 50”.
En el simposio se han dado a conocer prototipos de nuevas formulaciones y alimentos funcionales atractivos para la población mayor. Los nuevos ingredientes y aditivos también han formado parte del programa. Por ejemplo, se ha mostrado el palatinose como alternativa al azúcar, la proteína de guisante destinada a la nutrición clínica y los péptidos bioactivos de colágeno, que mantienen en buen estado huesos y articulaciones.
Los gustos y necesidades sensoriales de la población de mayor edad (gran parte aún en activo) han centrado buena parte de la jornada. Especialistas en alimentación de AZTI-Tecnalia junto a cocineros del restaurante Mugaritz han realizado una demostración de elaboración de nuevos productos con ingredientes funcionales. El ‘showcooking’ ha puesto de manifiesto que se pueden lograr propuestas de alta calidad gastronómica ajustadas a las texturas, maridajes sensoriales y requerimientos nutricionales demandados por las personas mayores.
El simposio ha contado con ponencias de expertos que han apuntado las características que deben presentar los productos diseñados específicamente para prevenir y corregir las deficiencias de las personas durante el proceso de envejecimiento. Según los especialistas, los alimentos para personas maduras tienen que contar con un perfil nutricional adaptado a sus necesidades concretas, como salud cardiovascular, refuerzo del sistema inmunitario, aporte de proteínas o regeneración ósea. Tendrán que ser, además, productos fáciles de preparar, conservar y servir, así como disponer de un envase y etiquetado apropiados para su fácil lectura y mensajes atractivos.