Por fin le toca el turno a la ganadora del concurso Food Trend Trotters que pusimos en marcha en AZTI el pasado verano… Clara Talens nos muestra sus originales descubrimientos en los supermercados de Berlín, de la mano de una sesión de cata junto a amigos y mucha sinceridad … Por cierto, el flamante premio a la ganadora, nada más y nada menos que un Ipad2, para facilitarle sus actividades como “Food Trend Trotter” cuando viaja por el mundo!
¿Queso con qué?… por Clara Talens
Con chocolate. Nada más y nada menos.
Indagando por los supermercados de Berlín, descubrimos combinaciones tan inesperadas como queso Philadelphia con chocolate Milka o cerveza con Coca-Cola.
Y como buenos cazadores de tendencias que somos, allá que nos llevamos los dos productos a casa para curiosearlos bien. ¿A qué sabrá? ¿Estará bueno? ¿Quién compraría esto?
En primer lugar probamos el queso untable con chocolate, y las reacciones fueron de lo más variopintas. No conseguimos ponernos de acuerdo en si sabía más a queso o a chocolate. Además, la mayoría quedamos desconcertados ya que uno asocia la marca Philadelphia al color blanco … no al marrón!!. Al final, uno de los aspectos más positivos que le encontramos fue que tenía la mitad de calorías que su posible equivalente (por ejemplo, Nocilla o Nutella) así que podría servir como sustituto en algunas meriendas infantiles (y no tan infantiles, claro).
En segundo lugar, y para acompañar este aperitivo tan sorprendente, decidimos probar la cerveza con Coca-Cola, a pesar de que las expectativas ya estaban un poco por lo suelos:
– “¿Quién va a querer cerveza con Coca-Cola?” – dijeron los que desconocían el kalimotxo.
Las primeras reacciones mejor verlas que describirlas. Después de mucho debatir, conseguimos llegar a un acuerdo: “es como una bebida gaseosa sin gas con sabor insípido”. Y vosotros os preguntareis: “¿pero qué clase de descripción es ésta? es como decir un olor inodoro o un color incoloro!”.
Pues queridos amigos, la única solución es que juzguéis vosotros mismos. Lo que está claro es que nuestras mentes no están preparadas para estas combinaciones improbables (que no imposibles), de ingredientes que por separado, podríamos consumir perfectamente a diario. Esto nos hace pensar hasta qué punto nuestro sentido del gusto o, más técnicamente, la aceptabilidad de un alimento está relacionada con nuestras costumbres. Estas combinaciones, relativamente extrañas, bien podrían haber salido de nuestras cocinas. Así que no hace falta viajar muy lejos para atrevernos a ser innovadores.
¿Seríais capaces de probar un queso cremoso con chocolate? ¿Reaccionaríais como nuestros amigos al probar una cerveza con Coca Cola? ¿Queréis saberlo?… Adelante video!