La comodidad es un concepto que va unido al mundo desarrollado, y también a la alimentación. Ya hemos hablado en algún post de ello y de cómo la innovación es uno de los caminos que toma, la de facilitar la vida a los consumidores. Vamos a ver hoy algunos ejemplos de productos en los que el envase está diseñado para facilitar la preparación, el uso, el servicio o la dosificación de los productos de alimentación.
Comenzamos por un yogur que se comercializa en “crush cups”, vasos cuyo formato recuerda a una especie de acordeón, lo que permite que, al apretarlos se puedan consumir directamente del vaso sin necesidad de cuchara. Este envase patentado (CrushPak) es especialmente indicado para productos viscosos o algo espesos como el yogur. Además este diseño requiere menos plástico que un vaso convencional.¿Y qué decís de este innovador envase monodosis para líquidos? Fabricado a base de los plásticos PET o PS, consta de una parte rígida y un film flexible. Con sólo una mano y dos dedos podemos servir de forma sencilla y sin manchar ketchup, mayonesa, preparados para ensaladas, mermeladas, cremas o licores.
El siguiente ejemplo aúna la comodida y la calidad/seguridad del producto. Esta “caja” incluye un dispensador muy simple que permite servirte un zumo o smoothie de forma cómoda y sin manchar, y además mantenerlo y servirlo a la temperatura adecuada, ya que no es necesario moverlo de la nevera.
El control de la ingesta y las porciones está a la orden del día, con lo que cada vez es más frecuente ver envases que facilitan este control. Es el caso de estos frutos secos que se presentan en un envase que no sólo es cómodo a la hora de consumir este tipo de productos, sino que tiene una “ventana” que permite calcular las porciones que se consumen.
En este mismo sentido, este innovador envase para el arroz tiene una tapa en forma de vaso que permite calcular las porciones (un vaso, dos porciones) del producto que se va a preparar.
Y para finalizar no nos podemos olvidar de la innovación que se está produciendo en el envasado orientado a la preparación del alimento en el propio envase, al microondas o al horno. Como ejemplo, este producto con base de arroz que se presenta en una bolsa de plástico microondable que permite no sólo prepararlo en 90 segundos en el mismo envase, sino también consumirlo.